El COVID-19, mejor conocido como Coronavirus, ha tenido un gran impacto en la industria de los videojuegos, desde el incremento de la actividad y demanda para juegos con retraso en algunos lanzamientos lanzamientos.
Además de actualizaciones y cancelación de eventos para la industria. El más conocido por todos y el más polémico, el E3.
Dos gigantes en la industria como EA y Activision ya han anunciado sus primeros resultados financieros desde el inicio del confinamiento y la aplicación de la distancia social, así como cambios en la misma.
EA declara que, como en la mayoría de las compañías, no estaban listos para un esquema de trabajo a distancia, donde la gran mayoría de los empleados estén trabajando desde casa. Inclusive crearon la iniciativa con el lema de «Stay Home, Play Together» (Quedate en casa, Juguemos juntos) para que los jugadores se entretengan en casa jugando.
El jefe de finanzas Blake Jorgensen de EA, explicó esto como un modelo de negocio que puede ser implementado dentro de la compañía.
Jorgensen menciona que la amplitud y la profundidad de los servicios en vivo dan la flexibilidad que necesitan los empleados para conocer lo que los videojugadores necesitan.
El directivo agradeció a cada uno de sus colaboradores el crecimiento que han tenido ante este gran reto, ya que la compañía ha mostrado una extraordinaria innovación, energía e ingenio, y aprendieron que a partir de este periodo de crisis, cambiará la forma de trabajar en EA para siempre.
Por lo que respecta a Activision cabe decir que también ha adoptado el esquema de trabajo desde casa y han notado algunas ventajas que esto conlleva pero también han descubierto algunos puntos no tan favorables, como los costos de testing y el incremento de tiempo para el tele trabajo.
En general la compañía menciona que la situación actual ha agregado complejidad y retos en algunas áreas del proceso del desarrollo de juegos, pero también representa una evolución en la forma en cómo se van a planear y desarrollar los futuros proyectos así como también contemplar el plan de salud de los colaboradores además de reestructurar la comunicación entre estos para mitigar en lo mejor posible problemas futuros.