GeeksTerra 26 de agosto.- El regreso a clases es muy significativo para padres, estudiantes y maestros, algunos alumnos ingresan por primera ocasión a la escuela y eso suele ser motivo de emoción para la familia.
En México existen más de 236 973 centros educativos dedicados a la educación básica y especial, de acuerdo con datos del Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos de Educación Básica y Especial (CEMABE), mismos que atienden al menos a 23 millones 512 mil 183 alumnos, lo que se traduce en una cantidad exorbitante de imágenes sobre el inicio o regreso a clases.
Los padres ilusionados con el inicio de una nueva etapa en la vida de sus hijos suelen fotografiarlos al portar por primera vez el uniforme del colegio, y aquellos estudiantes que ya son mayores a veces a provechan que han regresado de vacaciones para tomarse fotografías con los amigos.
Todo el mundo toma fotos y todo el mundo las comparte sin atender a los peligros que se esconden tras este acto que se ha vuelto tan cotidiano, por lo que es importante atender a lo que las fotos que enviamos dicen sobre ti o sobre tus hijos en caso de que ya se encuentren en edad escolar.
Una imagen dice más que mil palabras
Al analizar una foto, una persona puede fijarse en distintos detalles, de hecho son los detalles los que dicen más que la generalidad de la imagen, y es justo en lo que no solemos ver en lo que suelen fijarse las personas con malas intenciones hacia ti o hacia los pequeños que habitan en una casa.
En las fotos de niños que ingresan por primera vez al colegio se da una idea de la posición social que ocupa la familia, así como existen diversas escuelas públicas también hay diversidad de escuelas privadas cuyas colegiaturas varían de acuerdo con los servicios que ofrece el colegio.
Si la imagen con los alumnos contiene algún distintivo que indique en qué colegio se encuentran, la información ya es más que suficiente para que se muestre la ubicación esperable del alumno durante los días de clases y en algunos casos hasta los horarios.
Si además la imagen que se comparte muestra la fachada de la casa de los alumnos, lo que se está indicando es dónde viven y a qué estatus económico pertenecen, lo que es información que en caso de caer en malas manos puede ser usada para dañar a toda la familia que la comparte.
Si no se aprecia la fachada de una casa es posible que las imágenes de los alumnos que hoy se integran a clases tengan como fondo un auto y las placas del mismo, o los muebles de una casa, lo que vuelve a mostrar qué tanto se puede esperar obtener de una familia en caso de que se pretenda convertirla en víctima de extorsión o delitos mayores.
Una imagen dice mucho y hay que tener cuidado con ella cuando se pretende compartirla en la red, ahora, si eso dice una imagen fija, también es importante pensar en lo que dicen los videos de ingreso al colegio o de reencuentro con los amigos de la escuela.
A todos nos gusta compartir lo que hacemos y lo que vivimos día a día, pero si olvidamos que aunque se tengan candados en las redes sociales en las que se comparten las imágenes éstas se pueden divulgar con facilidad en Internet la emoción por el regreso a clases, puede fácilmente convertirse en un arma de doble filo.
Hay que ser cuidadosos con lo que se comparte y con el medio por el cual se comparte la información.
Fuente: Inegi