GeeksTerra 17 de septiembre.- El Museo Nacional de Antropología e Historia hoy cumple 55 años albergando en su recinto reliquias históricas que muestran la vida que se vivía en México antes de la llegada de los españoles, sus paredes están llenas de recuerdos y el lugar ofrece diversas experiencias a los visitantes apoyado en tecnologías que permiten una mejor asimilación de los contenidos.
Quien acude a un museo como el que se ubica en el bosque de Chapultepec puede llegar con la expectativa de encontrar piezas tales como la piedra del Sol, conocida coloquialmente como calendario Azteca, tomar un par de fotos y retirarse.
Pero tras la visita al lugar, quien entra al museo se dará cuenta de que el trabajo de los museógrafos permite una experiencia inmersiva ya que atiende a todos los sentidos y no se limita a la vista o al oído.
Desde hace más de 20 años el museo cuenta con audioguías, pero ahora el proceso de digitalización de ciertos contenidos ha permitido que lo que viene en las guías o se lee en las respectivas placas de cada pieza se complemente con imágenes en movimiento, con ayuda de pantallas y proyectores.
Los visitantes no sólo salen con la experiencia de haber visto piezas únicas, al dejar el museo se van con la idea de haber entendido mejor a las culturas que se desarrollaron en el territorio nacional o las que lo visitan y que provienen de lugares sumamente recónditos o lejanos.
La digitalización de un Museo.
Desde el 2010 el Museo Nacional de Antropología está en proceso de digitalizar su colección, en su página la institución señala que ya llevan miles de piezas fotografiadas, entre las piezas arqueológicas, fondo documental y colecciones etnográficas.
Cabe señalar que este acervo digital se puede consultar en gran parte mediante internet, lo que ayuda a observar cada pieza con lujo de detalle en caso de no poder estar in situ, y de necesitar de las imágenes para su uso es necesario solicitar una autorización
“En la digitalización colaboran diferentes especialistas del Museo Nacional de Antropología: directivos, curadores, restauradores, museógrafos, arqueólogos, antropólogos, historiadores, fotógrafos, editores de imagen, catalogadores y diseñadores gráficos bajo el asesoramiento profesional de CANON MEXICANA.” señala la institución.
La unión de lo histórico con lo moderno, es una experiencia que se puede vivir al visitar un museo como el inaugurado hace 55 años, ahora con las herramientas digitales que se tienen a la mano es posible acceder a la información generada por el trabajo museográfico con mayor facilidad, sin embargo eso no sustituye a la experiencia que se vive al visitar una exposición bien cuidada y que emplea tecnología de punta para ofrecer una mejor experiencia a usuarios cada vez más activos.
Es importante entender que la digitalización de un museo no se limita a la captura de imágenes sobre lo que éste alberga, la construcción de un sitio amable con el visitante y que le permita adquirir conocimientos, así como despertar su interés por acudir a ver las piezas en vivo es fundamental.
El trabajo que se realiza en la digitalización del conocimiento incluye la mano de obra de diseñadores, programadores, administradores web y diseñadores de experiencias lo que incluye la creación de narrativas con las que se pueda sentir identificado el público.
Del visitante pasivo al visitante interactivo
En el tiempo que lleva de vida el Museo Nacional de Antropología ha visto crecer y evolucionar a sus visitantes, hace unas décadas acudían a sus salas estudiantes con libretas en mano que en muchas ocasiones se veían obligados a escribir lo que decían las placas y papeletas, lo que producía una experiencia de visita en algunos casos aburrida y hasta cansada por tanto escribir.
Con la llegada de los celulares con cámara, los visitantes de los museos comenzaron a apilarse en torno a las piezas para fotografiarlas, a veces sin siquiera entender lo que se llevaban en su dispositivo, ya que al capturar imágenes dejaron de leer lo que sobre las piezas se decía, a pesar de ello, se puede hablar de visitantes más activos que los anteriores, ya que estaban generando información.
Con la existencia de códigos QR y el acceso al acervo fotográfico de los museos, los visitantes a los mismos pueden distraerse menos con la cámara y concentrase más en comprender lo que se presenta ante sus sentidos, además gracias al uso de herramientas como pantallas interactivas, el visitante pasa de ser activo a ser interactivo con los museos.
Si bien no es posible tocar las piezas que se exhiben en el Museo Nacional de Arqueología, debido a que hay que conservarlas y un toque puede dañarlas más que el paso del tiempo, en éste se exhiben materiales que si permiten al sentido del tacto interactuar y entender el trabajo que existe detrás de cada pieza, así como la riqueza cultural que posee cada cultura prehispánica.
En la medida en que se ha ido desarrollando la tecnología que permite nuevas experiencias a los usuarios, los museos evolucionan para ofrecer a sus visitantes recorridos atrayentes y llenos de contenido valioso.
Fuentes: Museo Nacional de Antropología, Espacio Visual Europa.