Desde octubre del 2021 se puede tramitar el pasaporte digital mexicano, el cual busca acelerar los procesos de identificación evitando fraudes y mejorando la seguridad en los sitios en los que se emplean, pero no sólo en México se usan estos documentos digitales, de acuerdo con estadísticas de Statista, el 64 % de los aeropuertos internacionales usará tecnología con E-passports a partir de 2023.
Los pasaportes de nueva generación, es decir digitales, se ajustan a normas internacionales emitidas por instituciones como la Organización de aviación Civil Internacional (OAIC), la cual actualmente está difrigida por las Naciones Unidas, lo que da cierto nivel de confianza respecto a los mismos, sin embargo todos debemos cuidar de la información que estos documentos contienen.
Los documentos digitales, como el pasaporte digital mexicano, incluyen datos biometricos como reconocimiento facial, huellas dactilares y datos del iris, lo que permitirá hacer un reconocimiento constante de los portadores de los mismos, especialmente al validar la identidad de los viajeros o asistentes a eventos masivos, por lo que se debe ser cuidados para evitar un mal uso de los mismos.
Protección de E-passport
Para agilizar la identificación de las personas en los aeropuertos y dar un mejor servicio es muy importante atender al cuidado de estos documentos y de los datos que contienen, ya que en caso de caer en malas manos pueden ser empleados con fines ilícitos que van desde la suplantación de identidad a otros casos más graves.
“La integridad de los datos se torna vital para su seguridad. Una protección integral es esencial para el valor cualquier sistema de autenticación. Por lo tanto, los protocolos y sus consiguientes actualizaciones que respaldarán estas nuevas implementaciones son una parte crucial de toda infraestructura y su éxito,” señaló el director Comercial en México dde VU, Gabriel Bravo.
Para proteger los datos biométricos de los usuarios del E-passport o pasaporte digital es muy importante enseñar al usuario a no confiar en todas las aplicaciones que lo soliciten, ya que es muy probable que surjan algunas que prometan facilidades al momento de identificarse en los aeropuertos y que sean riesgozas o que estén diseñadas para el robo de datos.
Los documentos digitales abren la puerta a grandes facilidades, pero es muy importante trabajar desde su surgimiento en la seguridad de los mismos, ya que sólo así se pueden evitar fraudes y otras prácticas maliciosas.
Es vital comprender que la cadena de seguridad de la información se compone de diversos eslabones y que la seguridad de todos los datos que contienen documentos, como el pasaporte digital, depende en gran medida de la capacidad de todos los usuarios para usar las aplicaciones correctas del mismo y mantener tales aplicaciones actualizadas.
“Tomando en consideración que lo más probable es que los e-passports sean leídos por
lectores de RFID o identificadores por radiofrecuencia que estarán instalados como parte de los controles de seguridad en aeropuertos, eventos deportivos o conciertos. Así, un primer reto a enfrentar será el skimming, es decir, a la lectura oculta o no autorizada de su
contenido a partir de lectores clandestinos” señala VU.
El paso hacia el futuro en la identificación de las personas no debe comprometer la seguridad y la integridad de las mismas, por ello tanto usuarios como instituciones deben trabajar coordinadamente para tener una estrategia de seguridad que impida el mal uso o robo de la información sensible.